En Mi Memoria.

He intentado de mil maneras posibles olvidarte... Aunque, creo que siempre ha sido una maldita excusa para encontrarte... He proyectado tantos recuerdos en millones de personas, por el simple hecho de conseguirte, de tenerte. Este deseo de poseerte me mata por dentro y me quiebra lentamente, cada día un poco más, cada día suspirándote y esperándote aun sabiendo que jamás regresarás.

Debo de aceptar, que mis labios se sienten un poco irritantes, secos, se encuentran quebrados desde que tú ya no estás, perdidos; por la falta de los tuyos, se mueren por abrazarte y ahogarme entre besos, entre caricias, entre miradas que hoy en día son tan ajenas a lo que sentíamos hace mucho tiempo. Y lo peor de todo, es que después de tanto, me sigues doliendo, me destruiste y yo me destruyo más cuando te recuerdo. Sólo soy una estúpida masoquista, que ni yo misma logro entender por qué te sigo esperando, por qué te sigo amando entre tanto dolor y sufrimiento, por qué mi alma ya ahogada sigue gritando tu nombre, esperando por una mano que me ayude a salir de este infierno.

Y lo más irónico es que nunca me ha gustado depender de alguien, depender de unos labios, de unos brazos, de unas manos y de una sonrisa, de unos ojos que al mirarlos siempre me confirman que todo está bien. Que todo el dolor y la soledad parece desdibujarse cuando estoy con él, cuando estás junto a mi... En mi memoria.